Hace ahora un año, un grupo de mujeres empresarias y directivas procedentes de 20 sectores diferentes creamos WERock Capital, un club de inversión que pretendía romper una lanza a favor de los proyectos creativos en los que hay presencia femenina. La cosa empezó con una cena y un grupo de Whatsapp de la mano de la emprendedora Helena Torras, la especialista en retail Ana Rebollo y unas cuantas mujeres más de la asociación EJE&CON que enseguida nos sentimos atraídas por iniciar esta aventura juntas y fundar un club de inversión femenino. Y, como ocurre a menudo con las iniciativas atrevidas, el proyecto creció. Hoy ya son -somos- cerca de 60 mujeres.
La importancia de invertir con un propósito
El mundo de las inversiones evoluciona y se adapta a las necesidades de la sociedad actual: ya no se invierte sólo con la finalidad de generar riqueza, sino que se utiliza como vehículo para lograr la excelencia inversora y el beneficio de los que nos rodean. Eso es, en grandes términos, invertir con propósito y es de lo que quiero hablaros hoy.
Permitidme que además complemente esta idea con mi significado particular: invertir significa crear oportunidades de futuro, significa apostar por el talento. Hoy, gracias a iniciativas como el grupo de inversión WERock Capital, en el que participo muy activamente junto a otras business angels de diferentes sectores, apostamos en startups innovadoras. Para ello escogemos propuestas en fase pre-seed y con un gran potencial de crecimiento, de forma que nos permitan acompañarlas en su trayectoria. Esto es lo más estimulante de la iniciativa: apostar por proyectos desde abajo y con un gran impulso tecnológico.
Positividad, energía y pasión
Nuestro perfil corporativo: la Mujer #WERock es generosa, comprometida, con ganas de aprender del ecosistema y generar impacto positivo. Nuestra inversión va más allá: nos ayudamos, compartimos experiencias y no paramos de aprender sobre el nuevo ecosistema digital gracias a nuestra implicación profesional. Es un win-win en potencia. Creamos valor y nos divertimos juntas.
Si queremos un mundo diverso, hemos de incentivar que la inversión fluya también con un mayor impacto social. Además, la multidisciplinariedad de los perfiles que componen el WERock lo convierten en un proceso de aprendizaje continuo en todos los niveles.
Women Angels investing differently. Friendly Partners for startups
La energía y el compromiso de todas las participantes es lo que más me gusta de formar parte de este grupo que ya cuenta con su primer proyecto conjunto: Pictoescritura, una startup de metodologías pedagógicas innovadoras. Y seguimos… ¡ya vamos por el Cuarto Deal Flow!
Mi aprendizaje de la experiencia
Seguro que este artículo se queda corto para expresar las cosas que he aprendido y sigo aprendiendo con esta experiencia. Pero haré un esfuerzo de síntesis para compartir aquí:
- La mejor forma de aprender sobre el ecosistema digital es asumir un papel activo: ¡learning by doing! Invertir, acompañar, colaborar… Participar de cualquier plataforma proactiva y generosa y en cualquier punto de la cadena de valor.
- Establecer un criterio claro de inversión permite que las decisiones sobre dónde invertir respeten un criterio objetivo que se ha pactado de forma colegiada.
- Aprender en comunidad es muy enriquecedor (diferentes sectores, perfiles, funciones…). Y aún más lo es hablar con otras personas que ya lo están haciendo.
- Ser partícipe de la evolución del sector y sus retos requiere tiempo de investigación, ser permeable, buscar alianzas… Esto significa formación, participación en foros, etc. ¡No os dejéis intimidar por todo el vocabulario emprendedor! Aprender este nuevo lenguaje y sus dinámicas o palancas es un gran activo que vale la pena.
- Acercarse a estas iniciativas, permite acelerar la innovación en empresas más tradicionales
¡Feliz primer aniversario WERock! ¡A por muchos más!
Un abrazo,
Isabel Nogueroles
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